Con una energía renovada y el propósito de sembrar las bases de una ciudadanía comprometida, la Contraloría del estado ha intensificado su innovador programa de formación cívica dirigido a estudiantes de nivel básico, consolidando una apuesta a largo plazo por una sociedad más justa y participativa.
Más de 400 niñas y niños de las Telesecundarias No. 11 de Tolcayuca y No. 697, así como del centro educativo Calmecac de Pachuca, participaron en jornadas lúdicas y pedagógicas orientadas a fortalecer valores esenciales como la honestidad, el respeto, la justicia y la responsabilidad.
Estas actividades, lejos de ser clases convencionales, integran dinámicas que estimulan el pensamiento crítico y promueven la reflexión ética desde la infancia. “Queremos sembrar desde pequeños la semilla de la legalidad”, afirmaron los facilitadores del programa.
Pero la apuesta ciudadana no se limita a las aulas. En paralelo, se capacitó a más de 30 integrantes de comités de vigilancia ciudadana en los municipios de Santiago de Anaya, Villa de Tezontepec y Tepeji del Río, quienes tendrán un papel clave en supervisar que las obras públicas se realicen conforme a lo establecido.
Estas acciones reflejan un enfoque integral: educar para transformar y vigilar para garantizar. Así lo subrayó el contralor Álvaro Bardales, quien reafirmó su compromiso con el fortalecimiento de una ciudadanía activa y consciente, como motor indispensable para lograr una administración pública honesta, eficiente y verdaderamente cercana a la gente.
Este impulso a la participación ciudadana no solo responde al presente, sino que construye los cimientos de un futuro donde la voz y acción de la sociedad sean el eje rector del desarrollo.