La Secretaría de Contraloría, dirigida por Álvaro Bardales, inició un proceso de supervisión detallada del parque vehicular en diversas instituciones educativas de la Huasteca hidalguense, con el objetivo de asegurar la integridad en el uso de dichas unidades.
El plan de trabajo comenzó en la Universidad Tecnológica de la Huasteca Hidalguense y en la Universidad Politécnica de Huejutla, donde se inspeccionaron 18 y 5 vehículos, respectivamente.
Durante las revisiones fueron verificadas minuciosamente las bitácoras de combustible, los registros de mantenimiento, el estado físico de los vehículos, así como el cumplimiento de pagos de tenencias y seguros.
Entre las observaciones realizadas se destacan problemas como llantas deterioradas, documentación incompleta, unidades en mal estado, sin pólizas de seguro ni placas visibles, así como con fugas de aceite. Además, se encontraron discrepancias entre las bitácoras de combustible y las condiciones físicas de los vehículos.