La dependencia emocional es un fenómeno que afecta a un número significativo de personas, se caracteriza por una necesidad excesiva de afecto, atención y validación por parte de otra persona, llegando incluso a descuidar el propio bienestar en pos de mantener una relación.
Se encuentra asociada con una sintomatología ansiosa y depresiva leve, como consecuencia de falta de autoestima y el miedo al abandono por parte de otras personas.
De acuerdo a datos de la Coordinación Estatal de los Programas de Violencia Familiar e Igualdad en Salud de la SSH, las mujeres de 15 años y más han experimentado al menos un incidente de violencia psicológica, económica, patrimonial, física, sexual o discriminación en al menos un ámbito, ejercida por cualquier persona agresora.
A nivel nacional, la violencia que más experimentaron las mujeres por parte de su pareja actual o última a lo largo de la relación fue de tipo psicológico (35.4 %), violencia sexual 23.3%, violencia económica y/o patrimonial 16.2% y la física 10.2%.
En tanto, en Hidalgo, la prevalencia por tipo de violencia es de 43.0% (aumento en consideración al 32%-ENDIREH 2016), psicológico (25.9 %), violencia sexual 9.2%, violencia económica y/o patrimonial 4.0% y la física 13.5%.