Esto ocurrió el 1 de julio del lejanísimo 1520. Luego de ser derrotadas sus fuerzas por los aztecas, conducidos por el emperador Cuitláhuac, cuando huían de Tenochtitlán, el capitán Hernán Cortés llora debajo de un ahuehuete, a un lado de la calzada Tlacopan. Este sitio pasó a la historia como el Árbol de la Noche Triste; hoy este árbol ya está seco y se sitúa actualmente en la avenida México-Tacuba de la Ciudad de México. Después de la “Noche Triste”, Cortés emprende la retirada hacia Tlaxcala para reponerse y volver a atacar a la Gran Tenochtitlán. Esa noche el conquistador pierde 400 españoles y más de dos mil aliados tlaxcaltecas.
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