- También es el segundo tipo de neoplasias más frecuente en los hombres, afirma Horacio Tovalín Ahumada
- Hoy se conmemora el día internacional de la lucha contra ese padecimiento
Cada año se diagnostican en México aproximadamente nueve mil nuevos casos de cáncer de pulmón y solo cerca de mil personas sobreviven, ya que la detección es tardía, señala el académico de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza de la UNAM, Horacio Tovalín Ahumada.
Se trata del segundo tipo de cáncer más frecuente entre los hombres adultos -mayores de 40 años- y es preocupante su incremento en las mujeres porque se ubica como el cuarto tipo de neoplasias más común en ellas, añade el también integrante del Laboratorio de Fisiología Pulmonar y Neumología Laboral.
La tendencia es que, en algún momento, el riesgo, la posibilidad y el número de casos va a ser muy parecido entre ambos géneros, como ocurre con las enfermedades cardiovasculares. “A cierta edad, las muertes por problemas de corazón son mayores en mujeres que en hombres”, explica.
Con motivo del Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Pulmón -que se conmemora hoy 17 de noviembre-, el experto universitario puntualiza que 85 por ciento de los casos son por estar expuesto al humo de tabaco, lo que es posible evitar.
El 15 por ciento restante se relaciona con la exposición, durante actividades labores, a radiaciones, asbesto, diésel, sílice, a compuestos atmosféricos sobre los que no hay control, agrega el también integrante de la Especialización de Salud en el Trabajo.
Dejar el tabaco es difícil, pero a partir de los años 40 del siglo pasado se demostró que es un agente cancerígeno potente, el más potente al que nos exponemos los humanos, y desgraciadamente lo hacemos voluntariamente, resalta.
El experto refiere la Encuesta Nacional de Salud, la cual reportó que en 2020 el 19 por ciento de la población adulta dijo ser fumadora. De ellos, nueve por ciento consumían tabaco diario. Además, 17 por ciento declaró haberlo sido con anterioridad. “Estaríamos hablando de que un 36 por ciento de los adultos son la población de mayor riesgo a este cáncer”.
Hay otro sector que no es tan fácil de cuantificar: los llamados fumadores pasivos, que generalmente son las parejas o hijos de los usuarios de cigarrillos. Aunque lo ideal sería no exponerlos, quienes tienen este hábito ven, incluso natural, que los adolescentes prueben esta sustancia.
En los jóvenes se incrementó el consumo, pues los vapeadores o cigarros electrónicos que, aunque no tienen tantas sustancias nocivas como el cigarro, favorecen el tránsito hacia este. El especialista se manifestó a favor de la prohibición de esos dispositivos y que haya más vigilancia sobre su venta.
Para el especialista es necesario mantener y reforzar diversas medidas que ayuden a reducir el consumo del producto. Por ejemplo, estudios han demostrado que aumentar el impuesto a las cajetillas puede disminuirlo hasta 15 por ciento, ya que al incrementar su costo es menos accesible para grupos de alto riesgo.