La final por el título de campeón en México, que conquistó Toluca ante un dignísimo adversario, Tigres de Nuevo León, lo anunciado días antes al salir del Guadalajara Javier Chicharito Hernández, y lo que se avecina, el próximo año: la Copa del Mundo, ubican al futbol como deporte que atrae a miles y miles de aficionados en nuestro país. La final de Diablos Rojos y Tigres que se enmarcó en 24 penales y la consolidación de dos figuras, Alexis Vega y el arquero de los hoy monarcas, Luis García, puso emocionante punto final al decisivo partido. El marcador global 9-8 a favor de los de casa. Lo de Chicharito se compendia en un excelente jugador de 37 años, siempre ofensivo. El 30 de noviembre pasado hizo efectivo aquello de “también los grandes fallan” al no anotar un penal ante Cruz Azul, y los tapatíos fueron eliminados. Ahora, cercanísimo 2026, estará en ebullición la Copa del Mundo, prematuro en analizar que equipos será los mejores. Hay que ser pacientes
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